Bellum convierte Twitch en “Mil Maneras de Morir”
En Rust no te fíes ni de tu sombra porque puedes perder la vida, el fruto de tu trabajo o ambas cosas a la vez.
Se suele decir que recoges lo que siembras, que tus buenas acciones son recompensadas y las malas no quedan sin castigo. Pero la diosa fortuna es muy caprichosa y no siempre hace lo que se espera de ella. Y en un evento como Bellum, donde ocurre de todo en todas partes y a todas horas esta diosa puede dar rienda suelta a su imaginación.
TheGrefg
Ayer a TheGrefg el karma le jugó una mala pasada. Se levantó muy temprano para empezar a raidear sobre las 6:00 (sí, inaudito, un streamer madrugando) y pillar así a los demás jugadores planchando la oreja. Ese directo matutino se saldó con un raideo exitoso y otro fallido. Por la tarde volvió a abrir para hacer un poco de PVE. Volaron él y su equipo a por las tres suculentas cajas del carguero y ya volvían a casa con el botín, pero entonces el mencionado karma atacó en forma de bug.
Illojuan
El karma no sólo castiga, también se supone que recompensa las buenas acciones. No fue el caso de Illojuan. En un lance del juego había tenido gresca con el equipo de Paracetamor pero dialogando y con una disculpa todo se solucionó, o eso parecía. Cuál fue su sorpresa cuando ayer se conectó y vio que esa misma gente les había robado hasta los calzoncillos. Menos mal que ahí está Andrés para planificar la resurrección del equipo.
Auronplay
Ya ha quedado claro que en Rust no puedes fiarte de la bondad de los demás ni del buen funcionamiento del juego, y tampco de la puntería de los integrantes de tu equipo. Hay una cosa que a veces se nos olvida y es el “fuego amigo”. Tus balas hacen el mismo daño a los enemigos que a tus compañeros, y Auronplay lo aprendió por las malas.
Xokas
Pero bueno, en el fragor de la batalla a veces es inevitable cruzarte en la trayectoria de los disparos de tus compañeros. Lo que Xokas no se esperaba es que esos mismos compañeros le dejaran vendido no por accidente, sino con premeditación y alevosía. También es cierto que no se trataba de su equipo habitual, ya que se había llevado a Ibai a conocer el vecindario.
Ibai
Y es que aunque Ibai se lo pasa muy bien jugando a Rust un par de horas su cabeza está en otras cosas. Ayer tocaba apoyar a sus chicos de KOI contra Fnatic en la Superliga y la partida salió a pedir de boca, con el equipo gustándose en los instantes finales.
