Twitch ha pegado un importante bajón de espectadores en noviembre y está en su nivel más bajo desde el año 2020.
Noviembre no ha sido un buen mes para Twitch. La plataforma ha tenido grandes momentos como la final de Worlds y el Mundial de streamers de TheGrefg, pero lo cierto es que el cómputo general no ha sido nada bueno en términos de audiencia. Ni a nivel global ni en español.
Así lo reflejan los datos recogidos por SullyGnome, que refleja una caída en el número total de horas visualizadas del 16,7% respecto a octubre. Es la segunda peor del año 2022, por detrás de febrero. No obstante, el segundo mes del año es más corto y, aunque también fue un mal mes, la caída de espectadores medios sí fue algo menor.
En términos de horas totales, no solo es el dato más bajo del año con 175 287 863, sino que también es la peor cifra para un mes completo desde 2020, cuando sí marcó cifras inferiores tanto en noviembre como en diciembre. El gráfico a continuación muestra la evolución desde enero de 2021.
Lo mismo sucede con la media de espectadores, que con 243 793 marca su peor dato desde diciembre de 2020. Curiosamente, en ambas métricas son datos muy similares a los de noviembre de ese año, cuando se anotaron apenas 100 000 horas visualizadas más que este último mes y 100 espectadores medios más.
El escenario es muy similar a nivel global, donde el total —según la misma fuente— ha sido de 1694 millones de horas visualizadas. Es la peor cifra desde septiembre de 2020, cuando lograron 1585 millones. Parece, por tanto, que la caía de Twitch es un fenómeno global.
No parece sencillo encontrarle una explicación. El descontento de los streamers con algunas de las decisiones que ha tomado la plataforma recientemente es notorio, pero por el momento no son demasiados los que se han ido a la competencia, aunque es algo que sí podríamos ver en un futuro.
En cuanto a los espectadores, en España sí se ha percibido durante las últimas semanas un importante aumento en el número de anuncios que aparecen durante las retransmisiones. Es una percepción y no hay datos que la respalden, pero el descontento sí se ha dejado notar en redes sociales y ha podido afectar a las audiencias.