Han pasado poco más de 7 meses desde que Biyín se estrenara en Twitch y su balance es más que positivo. Repasamos su trayectoria con números de infarto.
El 9 de diciembre del pasado año Sara, más conocida como Biyín, se estrenaba, para alegría de muchos, en Twitch, y lo hacía además con una emisión de récord. En las horas previas a su primera retransmisión, ya acumulaba la friolera de 400.000 seguidores en su canal. Hoy, menos de un año después, supera el millón con creces.
La creadora ha conseguido en este tiempo asentarse como una de las streamers de referencia en nuestro país, y ya suma más de 4 millones de horas visualizadas en su canal. ¡Se dice pronto!
Durante todo este tiempo hemos podido disfrutar de ella con Just Chatting, probando nuevos títulos y clavando cuchillos por la espalda en partidas de Among Us que pasarán a la historia. Además, Biyín se estrenó en el roleplay en Marbella Vice, serie en la que dio vida a Anya y que le sirvió para darse a conocer a un público nuevo.
Su buena relación con otros creadores, en especial con Auronplay, han sido clave para este espectacular crecimiento, pero sin duda el mérito de mantenerse es solo de Sara, que a día de hoy disfruta de una comunidad increíble donde, solo en Twitch, ya son más de 1 600 000 seguidores.
En su ‘corta’ vida como creadora de contenido, Biyín ha llegado a tener picos de 180.000 espectadores y medias de 12.000 viewers. Además, a lo conseguido estos meses se suma otro increíble reto después de este fin de semana, y es que en un solo día ha sumado más de 600 suscriptores a su canal.
Pero para presumir de éxito no hace falta quedarse en Twitch, y es que Biyín también cosecha muchos éxitos en sus otras redes sociales: solo entre Instagram y Twitter acumula más de dos millones y medio de seguidores, y da gusto disfrutar de la interacción que ofrece a su comunidad en ambas.
Desde aquí auguramos que su carrera solo puede ser ascendente y que, esperamos, aún nos queden muchas sorpresas que disfrutar de la mano de una creadora que solo acaba de empezar, ¿Verdad?
Pues en realidad No sé, soy Biyiner.