Turquía ha eliminado a España de la Kings World Cup Nations, nuestros futbolistas se encontraron con un determinante guardameta turco y no encontraron la manera de batirle.
Era imposible que España ganara hoy. La suerte no estaba a nuestro favor en la Kings World Cup Nations. La jornada comenzaba de la peor manera para España. Como si de una premonición tenebrosa se tratara, el sorteo de los cuartos de final nos emparejaba con Brasil, en caso de haber superado el Last Chance contra Turquía. Pero la mala suerte y, sobre todo, las brillantes intervenciones del portero turco, cambiaron el guion por completo.
El partido empezó cuesta arriba desde el minuto dos, cuando, precisamente, el guardameta turco cazó un disparo que superó a Víctor Vidal. España salió defensivamente bien plantada, con Guti encargado de neutralizar a la estrella rival, Suad Ak. Sin embargo, fue precisamente un chut del portero turco el que desató el peligro inicial.
Javi Espinosa dispuso de varias oportunidades para igualar el marcador, pero entró al partido con el punto de mira desviado. Había sido el héroe contra Italia, y esperábamos que repitiera una actuación similar en este crucial Last Chance. No pudo ser.
Poco a poco, España comenzaba a carburar. Los ataques se sucedían uno tras otro, pero la pólvora seguía mojada. El gol se sentía cerca, pero al llegar al minuto 17, la portería turca permanecía inexpugnable. Tocó el turno del dado, y la suerte no acompañó: un cuatro contra cuatro.
La Roja —hoy vestida de blanco— mantuvo su tónica ofensiva. Atacaba por la derecha, por la izquierda y con Vidal sumándose al ataque. Pero para ganar hay que meter gol, y España no lo consiguió en la primera parte. Turquía se fue al descanso con ventaja de 1-0.
En la reanudación, los otomanos pidieron el penalti presidente, un shootout que fallaron, dejando abierta una oportunidad para España. Adri Contreras, Grefg y Spursito estaban presentes en el pabellón de Milán, pero decidieron esperar el momento adecuado para pedir el suyo.
Finalmente, en el minuto 25, Adri Contreras tomó la responsabilidad. El presidente de El Barrio tenía en sus manos la posibilidad de empatar, y no falló. Con un tiro ajustado a la derecha del portero, igualó el marcador. A partir de ahí, España intentó desbordar al rival utilizando su arma secreta: el gol doble.
El minuto 30 fue crítico. La pelota seguía sin entrar en la portería turca, pero los otomanos tuvieron una ocasión clarísima que se estrelló en el palo con la portería vacía. Era el momento perfecto para que España reaccionara, pero la fortuna seguía esquiva.
La mala suerte volvió a golpear a La Roja cuando Turquía sacó su arma secreta, un comodín que les otorgó un penalti transformado por Aytürk Geçim. El 2-1 en el minuto 34 era un golpe duro. Pero dos minutos después, Aridai Cabrera apareció con una genialidad, picando el balón por encima del portero para devolver el empate al marcador. Sin embargo, la alegría duró poco, ya que Turquía volvió a ponerse por delante de inmediato. Con el 3-2 llegamos al minuto 38.
En los momentos finales, el portero turco volvió a ser decisivo, frustrando una ocasión clarísima para España. Oktay, el guardameta rival, fue el mejor jugador del partido y la gran pesadilla de La Roja. Sin encontrar la manera de batirle, España quedó eliminada del Mundial, mientras Turquía será el rival en cuartos de Brasil.