Una exmiembro del equipo de trabajo de Kick, Melissa, expuso a la plataforma asegurando que ha habido actitudes muy deplorables en el staff de la plataforma. La reacción de varios jefes de Kick en redes ha sido notoria y puede que todo acabe en los tribunales.
Cuando algo o alguien está en la cresta de la ola, en la viralidad y en el boca a boca general, es normal que surjan polémicas alrededor. Kick, la plataforma que promete rivalizar con Twitch a base de talonario, no iba a ser distinto y se ha destapado el primer gran escándalo con la plataforma.
Más allá de todos los debates que hay alrededor del origen de la financiación de Kick, con criptocasinos y casas de apuestas de fondo, el pasado 17 de junio una extrabajadora de Kick llamada Melissa ha expuesto varios escándalos dentro de la empresa.
Según comenta esta chica, dejó la empresa porque empezó a observar conductas inapropiadas en varios departamentos, asegurando que el ambiente era "demasiado hostil" y que había una constante falta de respeto con varias opiniones y formas de pensar.
Por ejemplo, en el vídeo asegura que hubo discriminaciones racistas e insultos a personas autistas, incluso actitudes deplorables contra un streamer de la plataforma con cáncer, afirmando que le ofrecieron menos dinero porque "se iba a morir antes de tiempo".
De hecho, esto último es lo que lanzó a Melissa a tomar la decisión, pues asegura que lo que hizo Kick con esta persona fue ofrecerle menos dinero y condiciones obligatorias de que apostara en Stake, pues querría dejar dinero a su familia de manera desesperada.
Kick no da crédito ante las acusaciones
El siguiente capítulo de esta historia continúa un día después con declaraciones de Santamaria, jefe de operaciones estratégias en Kick. Él asegura que nunca ha visto actitudes de ese tipo en las oficinas y afirma que están muy involucrados en crear la mejor plataforma de streaming con las mejores conductas posibles.
También hizo un stream hablando del tema, alucinando con el hecho de que estas polémicas surjan ahora y sorprendiéndose de que mucha gente importante de Kick se haya enterado de estos problemas a través de un vídeo de YouTube de una extrabajadora.
Obviamente, niegan todas las acusaciones y es posible que lleven a Melissa ante los tribunales por desprestigiar de este modo a la empresa, aunque también aseguran que van a investigar los casos que expone pese a ser "difícil" por la falta de pruebas.
Hasta el propio xQc, que tiene un contrato millonario con Kick, ha salido a defender a la plataforma asegurando que él investigó por su cuenta el caso del streamer con cáncer y confirma que no encontró nada reprochable.
Sea como sea, es el primer gran escándalo interno en Kick con acusaciones muy graves. Habrá que ver cómo avanza en caso y si salen más acusaciones sobre este tipo contra los trabajadores de la plataforma.