No es ningún secreto que la salida de Christian 'Lowel' García Antoran de Movistar Riders ha supuesto un terremoto dentro de la escena nacional de Counter-Strike: Global Offensive. Ya no solo porque estamos hablando de uno de los equipos más importantes —si no el que más— de todo el territorio nacional, también por la marcha de un jugador de una calidad enorme.
El propio Lowel, a través de sus redes sociales, publicó un comunicado donde explicaba lo que había ocurrido, siempre desde su punto de vista, comentando sentirse "decepcionado y desmotivado", ya que no se contó con él para hablar de "un tema muy serio" que afectaba directamente a su situación.
Ante la poca claridad en sus declaraciones, hemos querido hablar con Galder 'BladE' Bárcena, el entrenador del equipo, para conocer mejor lo sucedido y cómo se ha vivido todo el proceso desde dentro.
—Habíais decidido no hacer declaraciones. De hecho, Movistar eSports os lo pidió y desde el club se decidió que no se iba a remover el tema. ¿Qué ha cambiado para que queráis hablar ahora?
Lo que teníamos planeado hacer tanto nosotros como el club es lo que ha ocurrido estos últimos días. Entendemos que, una vez dado el paso por su parte de salir del equipo, lo mejor para nosotros era buscar la manera más limpia y tranquila posible de llevar el asunto para poder centrarnos en nosotros mismos y en buscar un sustituto. Pero, como he dicho, su comunicado en redes sociales nos obliga a aclarar diferentes aspectos que considero importantes.
—¿Por qué decides hablar tú en representación del equipo?
Entiendo que es mi responsabilidad. Mi figura como entrenador dentro del equipo me obliga a ello, ya que creo que debo proteger a mis jugadores y al proyecto. Ese es el principal motivo.
—Desde el comienzo del proyecto con Mixwell, una de las sensaciones que habéis transmitido es que sois una familia. ¿Cómo ha sentado dentro del equipo la salida de Lowel?
La salida de Lowel ha sentado muy mal dentro del equipo. Entendemos que la confianza y la lealtad son dos características indispensables para que este proyecto pueda tener éxito. Yo lo capté en cuanto entré, y por eso me vuelco en el proyecto todo lo que puedo. Haciendo él este movimiento, el cual respetamos pero no compartimos, ha demostrado no cumplir su compromiso, y eso es lo que más ha molestado al resto de jugadores y al club con mucha diferencia. Creo que ha dejado claro que tiene otros objetivos, pero si iba a irse, cuanto antes nos lo dijera mejor. En el momento en el que nos transmitió que quería irse ya no tenía cabida en este proyecto, porque se rompen esos valores de los que hablo.
—¿Y dentro de Movistar Riders en conjunto?
Desde el club nos han visto afectados y se han contagiado por el mismo sentimiento, entendiéndonos. Nos han apoyado desde el primer minuto hasta hoy. Yo llevo aquí tres meses y considero que su apoyo incondicional no ha cambiado, ni va a cambiar.
—El 10 de abril, Lowel hizo un comunicado por Twitter en el cual exponía los motivos por los que abandonaba el equipo. Según él, "parte del equipo estuvo hablando de un tema muy serio y en ningún momento contaron conmigo". ¿Es cierta esta afirmación? ¿En algún momento se le dejó de lado?
Creo que en este punto es importante dejar las cosas claras. Cuando se genera tanta expectación e ilusión por un torneo como la WESG, incluso sabiendo que sería difícil, la derrota en primera ronda es difícil de digerir. Es normal y totalmente humano que los jugadores, tanto a nivel individual como grupal, reflexionen sobre qué es lo que falla y qué se podría mejorar.
Diez días en China dan para mucho, y una de las reflexiones que se hicieron fue la posibilidad de hacer cambios de jugadores en el equipo. Entendí que esa conversación entraba dentro de mis competencias, así que al volver de China hablé con todos los jugadores del tema. Y no solo de este, sino también de muchos otros.
Hablé con todos también individualmente, por supuesto, Lowel incluido, quien me transmitió que él no quería hacer ningún cambio. Comentaba que lo mejor era seguir trabajando y evolucionando, progresar como equipo, y yo como entrenador compartía ese punto de vista. Pero quiero dejar muy claro que nadie, en ningún momento, tomó ninguna decisión. Los jugadores no toman decisiones, ni en los esports ni en ningún otro lado, para eso está la figura del club y la mía como entrenador. Quiero dejar claro que en ningún momento se me ha pasado por la cabeza ni un segundo hacer cambios en el equipo. Abogo por la unión y por el progreso del grupo, y así se lo hice saber en esa reunión con todo el equipo. Les dije que el plan a partir de ese momento no era más que seguir trabajando como estábamos haciendo, mejorar determinados aspectos, yo como coach incluido, pero que el plan era estar más unidos que nunca y trabajar más que nunca para que las cosas funcionaran. Eso fue todo lo que ocurrió.
—El equipo parece metido en una racha negativa de resultados desde la WESG. ¿Puede que eso haya motivado su partida? ¿O quizá esa mala racha fue motivada por su actitud en el seno del equipo?
Si llamamos mala racha a clasificarnos para los playoffs de MDL en nuestra primera temporada, que baje Dios y lo vea. Es cierto que esta temporada no da acceso a la Pro League, pero el nivel de los equipos es extremadamente alto igual. Ningún equipo español en la historia lo ha conseguido antes, y hemos llegado a la final conmigo como jugador, lo que baja bastante el nivel equipo y entraña muchas otras dificultades.
—Además de este, ¿hay otros puntos de ese comunicado con los que estés en desacuerdo?
Sí. En relación al partido de MDL en el que decidimos que jugara yo en vez de Lowel, no tengo ningún problema en decir que me pareció la mejor decisión posible. En cuanto me transmitió que tenía la posibilidad de hacer una prueba con Hellraisers, yo como entrenador lo único que hice fue ponerle facilidades. Incluso para poder entrenar con ellos sin saber cuál sería su decisión final. Si él quería hacerlo, lo mejor era ayudarle, pero nosotros teníamos un calendario muy complicado.
El 29 [de marzo] teníamos un partido de la Kalashnikov Cup contra Syman, el primero de la temporada. Y consideré que lo mejor para el equipo es que Lowel no jugara. Conociéndolos a todos, pude vaticinar el resultado de aquel partido si jugaba, no en cuanto a resultados, sino en cuanto a sensaciones. Me reuní con el club, pero consideraron que, como aún no había dado el paso con Hellraisers y tenía una relación contractual con nosotros, debía jugar. Me pareció una decisión coherente.
Jugamos el partido, y como yo esperaba, fue un desastre. La situación fue muy tensa y violenta para el equipo. Él siempre ha tenido una actitud muy buena, siempre ha aportado mucho, pero aquel día no estuvo del todo acertado en su actitud. Perdimos. Volví a reunirme con el club y decidí definitivamente que Lowel no jugaría en la MDL, y para poder cumplir el reglamento, ya que no se permite tener suplentes ni incorporar un stand in, tenía que jugar yo. Lo hablé con él previamente y le pedí que lo entendiera. Y él me dijo que lo entendía. Durante esa semana incluso se le dio libertad para que entrenara con Hellraisers, y así lo hizo. Esa es la historia real.
—¿Cómo era la actitud de Lowel en el día a día? ¿Se llevaba bien con el resto de compañeros?
La actitud de Lowel era muy buena, no tengo nada que reprocharle. Evidentemente no es el jugador perfecto y tenía cosas que mejorar, pero yo estaba contento con él, y lo sabe porque se lo dije. De hecho, cuando me comentó el tema de Hellraisers, le comenté que no quería que se fuera, que era una pieza fundamental para nosotros. Tenía una relación muy buena con todos los jugadores, buena actitud, le ponía ganas, y en los partidos oficiales y en los entrenamientos aportaba mucho. No tengo nada que echarle en cara en ese sentido.
—¿Supone la salida de Lowel un paso atrás en cuanto al nivel general del equipo?
Supone un nuevo reto, una nueva manera de ver las cosas. Ahora tenemos un jugador muy diferente y hay cosas que tendremos que encauzar, pero también hay otras ramas que se nos van a poner más de cara. Estamos muy ilusionados y con muchas ganas de seguir entrenando con el nuevo jugador para poder seguir evolucionando.
—¿Cuáles son las principales diferencias entre DeathZz y Lowel?
Lowel tenía mucha experiencia que le venía muy bien al equipo en todo tipo de situaciones. Pero también observé que habíamos adquirido vicios debido al estilo de juego de Lowel. Esto no es ni bueno ni malo, solo ocurría, y era difícil de cambiar. DeathZz es un jugador muy valiente, con un perfil mucho más agresivo, es una verdadera esponja que vamos a poder moldear como queramos. Haremos de DeathZz un jugador muy importante para la comunidad española en el futuro.
—¿Qué tal ha encajado el nuevo jugador en el equipo? ¿Estáis contentos con él dentro del poco tiempo que lleváis juntos?
Pues estamos muy contentos con él, con cómo afronta cada reto para poder subir más escalones, con su naturalidad y tranquilidad. Se ha acoplado bien al equipo, y tiene una muy buena relación con los jugadores. Aunque bueno, todos le teníamos en muy buena estima ya de antes, y eso siempre ayuda.
—¿Qué tal os veis de cara al importante clasificatorio de la Blast Pro Series Madrid?
Nos vemos bien. Solo tenemos que ganar un partido. Somos conscientes de la importancia de este torneo para nosotros, para el club y para la comunidad. Vamos a trabajar todo lo posible para conseguir la victoria, pero teniendo en cuenta que necesitamos adecuar algunas piezas y cambiar cosas. El calendario no ayuda demasiado. Recientemente hemos sido eliminados de LootBet, y, aunque esto obviamente tiene cosas malas, también las tiene buenas, ya que podremos estar mucho más tranquilos y entrenar de verdad, algo que llevamos un tiempo sin poder hacer.
—En caso de clasificaros, ¿cómo os veis contra equipos como Astralis o NaVi, que son indudablemente de los mejores del mundo?
Está claro que hay una diferencia importante de nivel si hablamos de equipos como Astralis o NaVi, pero nosotros siempre confiamos en nuestras posibilidades. Sobre todo, es una nueva oportunidad para aprender. Yo a mis jugadores les he dicho que este torneo le puede cambiar la vida a más de uno.
—Una vez acabe la Blast y sin Lowel, el equipo tiene que volver a pasar por un proceso de adaptación para incorporar a DeathZz (nuevas tácticas, etc.). ¿Qué objetivo os fijáis para esta temporada (2019) teniendo esto en cuenta?
No me gusta hablar de posiciones en torneos, ni sobre qué tenemos que ganar. El objetivo es poder trabajar cómodos, mejorar, encontrar nuestros fallos para progresar como equipo y adaptar a DeathZz lo máximo posible a nuestro estilo de juego.
—Los chicos han comentado en varias ocasiones su intención de trasladarse a Madrid, pero esa decisión parece no llegar a ejecutarse. ¿Te complica la vida tener a parte del equipo disperso por España o no te supone un problema?
Todos los jugadores demostraron su deseo de venir a Madrid, pero cada uno tenía que solucionar su situación a nivel personal para poder dar el paso. Éramos conscientes de que el proceso requería ese tiempo, pero ya está solucionado. De aquí a la semana que viene ya estará todo el equipo viviendo en Madrid, lo que hará las cosas más fáciles.
—¿Cuál es el mayor reto a superar para que el equipo se meta en el top 30 de HLTV?
Llegar al top 30 de HLTV es un reto importante para todos nosotros. Yo cogí el equipo cuando estaba en el puesto 76 o 78 en el ranking, y en dos meses y medio nos metimos en el 36. No estaban muy habituados a competir de manera constante contra equipos de ese nivel. Necesitábamos perder, las veces que fueran necesarias, para saber qué teníamos que mejorar, y de esa forma no solo llegar, sino mantenernos. Hemos bajado unos puestos, pero en cuestión de días eso puede cambiar. Lo que sí está claro es que necesitamos medirnos con equipos de entre el top 45 y el 15 de manera constante. En cuanto lo hagamos, estoy seguro de que lo lograremos.