¿1.800 millones de dólares en 2020?

Las cifras a nivel mundial hablan por sí solas: el mercado de las apuestas en deporte electrónico movió 550 millones de dólares en 2016 y la previsión para 2020 se sitúa en la escalofriante cifra de 1.800 millones de dólares. Eso hablando de beneficios esperados por parte de las casas, porque quizá el dato global, el del dinero que se calcula que se va a invertir en apostar, es todavía más escalofriante: 23.500 millones según datos de GeekWire. Son los datos con los que trabaja Kirolbet, una de las que más firmemente ha apostado por el deporte electrónico en nuestro país, llegando incluso a ser uno de los patrocinadores de Baskonia. 

“El volumen de apuestas en esports va a llegar a ser tan importante como el del fútbol. Quizá no tanto en nuestro país, pero desde luego a nivel mundial va a llegar a superarlo”, comenta Pablo Cabeza esports manager de la casa de apuestas vasca. Y es que el ritmo en España es diferente. Se nota a nivel deportivo y competitivo, cosa que también ocurre a nivel de asentamiento social. De todos modos, la ventaja de apostar en nuestro país es que “tenemos un mercado regulado y con garantías. En España no está permitido, por ejemplo, apostar con 'skins' como en otros países. Y eso ofrece garantías al usuario. Es un mercado absolutamente seguro. Imagínate que tienes que irte a reclamar a Gibraltar, o a Malta o a las Islas Caimán”.

Otro de los detalles interesantes desgranados por Pablo Cabeza en el último The Gaming House, es el perfil medio del apostante en deporte electrónico: hombres de entre 18 y 40 años. ¿La razón?, un tanto nostálgica: “Son gente que ha crecido jugando a los primeros videojuegos y que ahora ven cómo sus hijos lo hacen y quizá es un punto que comparten con ellos. Pero todos tienen muy interiorizado el concepto y, por tanto, no les resulta ni raro ni ajeno apostar en estas competiciones”.

Competiciones que sí tienen una particularidad con respecto al resto de deportes en los que habitualmente se apuesta. “La mayoría de los apostantes lo hacen en mercados comunes. Lo clásico del 1x2, apostar al ganador global de un determinado evento y demás. Pero en los esports es necesario establecer también una serie de modalidades concretas como número de dragones, torretas derribadas o 'Nashor'. Es la principal diferencia que podemos observar”.

Kirolbet comenzó a apostar, valga la paradoja, por los deportes electrónicos con las finales de los Worlds de hace un par de años y es una de las casas que más firmemente lo ha hecho. “Si en España somos 15 casas de apuestas, puede que cinco seamos las que más trabajamos los esports. Desde luego, para nosotros, el deporte electrónico está ahora mismo en el Top 5 de las apuestas”. Un mercado reciente en España, pero con un crecimiento que ha de ir acorde con el previsto a nivel mundial. Otra arista más de un mercado que levanta pasiones y que, gracias a eso, se abre paso en todo el mundo como un incipiente y prometedor negocio.