Uno de los grandes referentes de los esports en consolas ha recibido un duro golpe tras la decisión de OpTic Gaming, uno de los equipos más legendarios en Halo, en abandonar la escena competitiva.
El título de Bungie es uno de esos esports que causan furor en Norteamérica, pero que fuera de sus fronteras está muy lejos de esa popularidad. La decisión de OpTic sorprende a nivel de resultados, y es que en propiedad tiene a una de las mejores plantillas de la historia con el Mundial de 2017 y la DreamHack Denver entre sus últimos logros.
La salida de OpTic más que por el nivel deportivo está relacionada con la constante pérdida de interés sobre Halo en el mercado de los esports. Tras la salida del club, el juego recibe un golpe casi mortal que tendrá un enorme impacto en la escena competitiva.
La caída en picado como esport de uno de los grandes referentes en la industria del videojuego durante las dos últimas décadas y de los esports en consola en norteamérica, nos hace pensar que nadie está a salvo y que una licencia de éxito debe seguir cuidando y perfeccionando su producto para continuar siendo referencia en el deporte electrónico.
¿Volverá algún día Halo al primer plano?