El cambio de entrenador le ha sentado a las mil maravillas al equipo de Gemita, que ha conseguido tres victorias consecutivas y le sitúa en puestos de playoffs.
Con tres victorias consecutivas, Porcinas se ha colocado en la zona de playoffs, manteniendo vivas sus opciones de alcanzar la gran final en Tenerife. El equipo de Gemita ha pasado de ser uno de los peores de la liga a convertirse en uno de los que mejor juego despliega. Todo gracias a un movimiento clave: la llegada de Narcís Barrera al banquillo, junto a Carlitos González y Marcos de Olañeta.
A pesar de esta mejoría, aún quedan tres jornadas para que finalice la liga regular, y el equipo tendrá que sufrir para alcanzar su objetivo. Sin embargo, el cambio en el estilo de juego es evidente, y se han tomado decisiones acertadas tanto en el terreno de juego como fuera de él.
No solo el rendimiento colectivo ha cambiado, sino también los momentos claves de Gemita en el campo. La presidenta ha lanzado los tres últimos penaltis disponibles, independientemente del resultado. Esto contrasta con lo ocurrido en el último partido del anterior staff técnico, cuando, de manera incomprensible, Gemita no fue autorizada a lanzar la pena máxima, algo que aceptó a regañadientes desde la cabina. Aunque tirar el penalti supone que el rival también disponga de uno, es una oportunidad que puede marcar la diferencia en momentos cruciales.
El impacto de Narcís fue inmediato. En su primer partido al mando, Porcinas venció a Kunitas, uno de los equipos mejor posicionados en el torneo. Fue un duelo ajustado que terminó 7-6 a favor del equipo de Gemita, mostrando el carácter competitivo del conjunto.