Videojuegos

Así se defiende Pokémon de las filtraciones

Pokémon es una de las sagas más longevas de los videojuegos, con algo más de dos décadas a sus espaldas, y sus aficionados se cuentan por millones. Por ello, no es de extrañar que cada vez que anuncien un nuevo juego estos estén esperando continuamente nueva información.

The Pokémon Company sabe lo valiosa que es la nueva información sobre su próximo juego y por ello trata de medir al milímetro la información que sacan al respecto. No obstante, es habitual que se produzcan multitud de filtraciones, algunas de las cuales terminan destapándose como falsas, mientras que otras se confirman con el paso de los meses.

En el caso de Pokémon Espada y Escudo hubo una particularmente certera a finales de mayo, pero un par de semanas antes de que los juegos saliesen oficialmente se filtró prácticamente toda la Pokédex y buena parte de todas las novedades que traía el juego.

La compañía presentó durante la segunda quincena de noviembre una demanda contra unos particulares acusados de filtrar la guía oficial —que contiene toda la información del juego— antes de su lanzamiento, utilizando para ello Discord. La demanda, que puede consultarse a través de este enlace, incluye capturas de esos momentos.

The Pokémon Company explica en la demanda que mantener el secreto les genera un gran valor económico, ya que la industria del videojuego es "altamente competitiva" y para mantener el interés y la emoción por los nuevos juegos buscan programar cuidadosamente los anuncios.

En uno de los apartados de la demanda, The Pokémon Company detalla los procesos que lleva a cabo para tratar de proteger la información de los nuevos juegos. Estos procesos incluyen desde revisar el historial de los empleados a la firma de acuerdos de confidencialidad o la protección concreta de algunos archivos.

Estas medidas de protección también se aplican a la guía de estrategia, ya que para desarrollarla necesitan subcontratas a las que le obligan a firmar estos acuerdos de confidencialidad y a las que les prohíben imprimir copias físicas. Los vendedores encargados de esta parte también tienen que firmar esta clase de acuerdos.