El youtuber nos cuenta su experiencia en La Velada del Año IV, donde participó en una de las grandes novedades del evento.
Sezar Blue se subió al ring de La Velada del Año IV. Lo hizo por varios motivos, a sabiendas de que había dicho con anterioridad de que no iba a hacerlo nunca. Su mensaje de 'stop bullying' es el más escuchado tras varios días desde que se celebró. Probablemente sea el único que no se ha limitado simplemente a reaccionar a los combates y actuaciones.
Hablamos con él semanas antes de la velada y hemos querido volver a hacerlo para que nos contara su experiencia. Desde nuestros ojos, El Rey de la Pista fue divertido, aunque reinó el caos para el espectador. Las rondas eran tan solo de un minuto y a veces no le daba tiempo al realizador ni a poner los nombres de los boxeadores en el ring.
Sezar comparte esa sensación, aunque en su caso tiene una explicación más lógica. Tenía muy claras las normas del combate y la primera entrada se hizo tal y como esperaba. Pero tras la salida de todos los boxeadores llegó un poco de jaleo extra. ¿Quién debía entrar y cuándo?
Sin embargo, lo peor para Sezar era saber contra quién peleaba. Obviamente, tuvo que pelear sin gafas, con visión reducida. Tenía muy complicado conocer quién era su rival y entro al ring a pegarse contra un desconocido. No es que no conociera a su rival, es que no le podía identificar.
"Tres minutos de mi vida que pasaron como locos y de los que tengo ciertas lagunas", explica. "Estaba tan emocionado que luego no sé si hablé con mi entrenador Carlos, como mi entrenador Rubén, si hable con el compañero... Entre asalto y asalto estaba como en otra película".
"Cuando estaba esperando a salir de nuevo, tampoco sabía si me tocaba o no. Al no llevar las gafas, hasta que no llegué a mi casa y puse los vídeos, no tenía muy claro contra quién había boxeado. Cuando te bajabas del ring, no sabías con quién te tocaba, en qué posición habías salido o con quién te habías peleado".
Sezar se va con una sensación magnífica a pesar de los líos que la noche y la miopía le habían provocado. Fue el más aclamado de El Rey de la Pista por el público, junto a Karchez, vencedor del su combate. "La sensación de este tío se merecía algo más la he percibido cuando me saludan por la calle y me dicen que debería haber ganado", celebra.
Eso sí, por el momento ya ha tenido suficiente vida de deportista de competición. Sezar admite que seguirá entrenando boxeo, pero no quiere prepararse para nada más y prefiere no recibir golpes. Lo de participar en otro evento similar, no le convence. Puedes ver la primera parte de la entrevista en este artículo.
Foto: Gisela Jané (@giselajane - Instagram)