Ibai Llanos / @elpozoking

Firmas de opinión

Me perdí la Europa League del Villarreal por una velada de boxeo con Ibai

Si todavía tenía dudas sobre la fortaleza y el cambio en la forma de consumir ocio que supone plataformas como Twitch, la final de la Europa League y la velada de boxeo de Ibai me despejaron todas ellas.

Como gran aficionado al fútbol, la final de un torneo europeo la tengo bien apuntada en el calendario de mi móvil. Esperé casi 20 años para ver a Sanchís levantar la séptima Copa de Europa. Y antes había visto arrasar al Milan o ganar su primera Champions al Barcelona con aquel gol de Koeman. No me perdía una.

Uno de los días más felices de mi vida en el fútbol fue cuando entró ese gol de Nayim y le dio la Recopa al Zaragoza. Uno de los peores días, sin embargo, fue cuando el Alavés perdió la final de la UEFA con esa estúpida regla del gol de oro. Al igual que el penalti errado por Riquelme, que truncó el camino hacia la gloria del Villarreal.

El fútbol a veces es muy cruel. Pero en otras ocasiones devuelve lo que una vez quitó. Lo hizo anoche con el Villarreal. Se proclamó campeón de la Europa League tras la, posiblemente, mejor tanda de penaltis de la historia. ¿Y qué estaba haciendo yo? Pues estaba viendo una velada de boxeo por primera vez en mi vida —a no ser que las pelis de Rocky cuenten—.

Florentino Pérez, presidente del Real Madrid, acertaba con lo de la Superliga en una cosa: los jóvenes —y no tan jóvenes— tienen otros intereses. El fútbol se está quedando atrás, y a no ser que en la final esté un Madrid, Barcelona o Atleti, el resto genera menos expectación y pasa a un segundo plano.

Seis streamers se subieron ayer a un ring. Seis creadores de contenido aficionados, como mucho, a este noble deporte. Una emisión de este tipo en la tele hubiera pasado sin pena ni gloria por la madrugada de una canal de TDT cualquiera. En Twitch reunió a más de un millón y medio de personas. Yo entre ellos.

Los Trending Topic de Twitter no hablaban del Manchester United o del submarino amarillo. Lo hacían de Jagger, Reven o Elmillor. Y, por supuesto, de Ibai, a quien debemos en gran parte el cambio que se está produciendo.

Debo confesar que no vi el cambio con antelación. No pensaba que el fútbol, de verdad, estuviera perdiendo tanto el interés. Ayer lo viví en primera persona y no me arrepiento, lo hice por puro convencimiento. Mis respetos a quien lo viera antes que yo.