El torneo de Fortnite era uno de los eventos más esperados del E3. A pesar de todas las conferencias, las presentaciones de los videojuegos y demás acciones, ver a los mejores jugadores de Fortnite se había convertido en la prioridad.
Esto suponía para los jugadores un gran reconocimiento, y al mismo tiempo una gran responsabilidad, pero estuvieron a la altura. La puesta en escena fue un espectáculo, tanto por la ambientación, con las letras de Fortnite en las gradas, como por muchos elementos del juego.
Ahora solo quedaba que las partidas estuvieran a la altura, y vaya si lo estuvieron. Quizás Ninja estuvo algo por debajo del nivel esperado, pero lo cierto es que el resto de jugadores nos deleitaron con algunas jugadas espectaculares y de gran calidad.
Esto, como no podía ser de otra forma, se vio reflejado en los números de audiencias del torneo en todo el mundo. El gran dato se lo ha llevado Twitch con casi 1,5 millones de espectadores concurrentes (algo histórico) entre el streaming de la propia Epic Games y el de Ninja.
Sin embargo, el problema es que había muchas más retransmisiones y plataformas simultáneas que hay que sumar a estos datos. Por ejemplo, en Youtube hubo un total de 88.000 espectadores en el streaming oficial.
Otro de los grandes problemas a la hora computar datos es que no se han tenido en cuenta otros streamings, como los realizados en España, por lo que este dato global es todavía mucho más cuantioso. Sin lugar a dudas, estamos ante un suceso histórico.
El gran problema que tiene Epic es como conseguir superar esto que acaban de lograr, ahora bién, si hay un compañía que ya ha demostrado que hay que confiar en ellos es esta. Y todo esto, con el Mundial de Fortnite en el horizonte.