En una conferencia de prensa el pasado jueves, la Japan Esports Union (JESU) declaró que acelerará sus esfuerzos para mejorar el reconocimiento de los esports en Japón, teniendo en el punto de mira una posible exposición en los Juegos Olímpicos (JJOO) de Tokyo 2020.
El presidente de la JESU, Hideki Okamura, declaró que "la popularidad de los esports en Japón ha crecido del último año a este y los llevaremos a una nueva fase el próximo año". JESU creará en 2019 sucursales regionales a lo largo de once prefecturas, para compartir en todo Japón conocimientos sobre la organización de eventos de esports y el desarrollo y entrenamiento de jugadores locales.
La exposición de los esports en una cita olímpica no sería una novedad en caso de que esto ocurriese en Tokyo 2020. Antes de los últimos JJOO de invierno celebrados en la localidad surcoreana de Pyeongchang, tuvo lugar la IEM de StarCraft II, un torneo que fue todo un éxito y que situó muy cerca a los deportes electrónicos y el tradicional. Por otra parte, el Comité Olímpico Internacional (COI) declaró recientemente que hacer que los esports sean un deporte olímpico es algo prematuro, y una de las razones es el carácter comercial de estos en su industria.
La JESU se creó en el mes de enero con el objetivo de promocionar los deportes electrónicos en Japón, uno de los países más importantes del mundo en la industria del videojuego pero que al contrario que China y Corea del Sur, no tiene una cultura en los esports. Un sector que comienza a afianzarse una vez superada la barrera que limitaba los premios económicos
*Imagen de cabecera propiedad de Dan Orlowitz (The Japan Times).