La nueva generación de videoconsolas está aquí y, aunque las nuevas apuestas de PlayStation y Xbox tienen muchas similitudes, también existen ciertas diferencias.
PlayStation 5 y Xbox Series X están a la vuelta de la esquina. Las dos videoconsolas de nueva generación han confirmado a lo largo de las dos últimas semanas su fecha, su precio de lanzamiento y también algunas de las características que estaban en el aire.
Que son videoconsolas distintas es evidente, puesto que cada una de ellas procede de una familia distinta y tienen sus servicios particulares y sus juegos exclusivos. Pero... ¿cuáles son exactamente todas las diferencias?
El precio es idéntico, ya que ambas costarán 499 € de salida, y tampoco habrá mucha diferencia en la fecha de salida: Xbox llegará el 10 de noviembre y PlayStation 5, al menos en Europa, el 19. Sí las hay en cuanto a sus versiones 'baratas', que apuestan por modelos totalmente distintos, pero de momento vamos a centrarnos en las principales.
En general, Xbox es más potente, ya que cuenta con una CPU ligeramente mejor, una GPU superior —12 Teraflops frente a 10,28 de PlayStation 5—, un ancho de banda mayor y más almacenamiento de base —1 TB frente a los 825 GB de Sony—. Ambos discos duros son SSD y el de PS5, pese a tener más capacidad, es más rápido —5,5 GB7s frente a 1,4 GB/s—. En cuanto al resto, ambas tienen una arquitectura RDNA2 y 16 GB de RAM.
Las características técnicas no son la única diferencia, ya que también varia el tamaño entre ambas. Las dimensiones de la PlayStation 5 son de 390x104x260 y las de la Series X 301x151x151. También pesa ligeramente más la videoconsola de Sony, aunque sorprende lo similares que son los pesos (4500 gramos por 4445).
En resumen, Xbox Series X es, al menos sobre el papel, más potente que PlayStation 5. Pero la potencia pura no es lo único que puede afectar a un jugador a la hora de decidirse por una o por otra, ya que cada una tendrá su propio catálogo específico y los exclusivos pueden terminar por decantar la balanza de muchos jugadores a un lado u otro.
Por último, cabe destacar que Xbox tiene la Series S, una consola de menor potencia y mucho más barata (299 euros) con menor almacenamiento y sin lector de discos. PlayStation 5, en cambio, apuesta porque la versión barata suba más de precio (399 €) y se decanta por una consola idéntica con la ausencia del lector de discos como la única gran diferencia.