Con tan solo 18 años, Danny no solo ha conseguido su primer título de LCS, sino que ha carrileado completamente a Evil Geniuses en los playoffs finales y se ha confirmado como la gran promesa de Estados Unidos en LoL.
La dinámica de títulos en Norteamérica ha cambiado. La LCS, antes dominada por TSM, C9 o Team Liquid, lleva dos split consecutivos erigiendo a un nuevo campeón y, sobre todo, descubriendo a potentes promesas de futuro.
Aunque hablar de tiempos venideros es erróneo, sobre todo cuando Danny y joyopyun, dos de las estrellas de Evil Geniuses, han llevado al título a una orgnaización que nunca antes había ganado una LCS.
En la noche del domingo 24 de abril, Evil Geniuses ganó 3-0 a 100 Thieves en la final más rápida de la historia de la LCS, pasando por encima del vigente campeón y canjeando su billete para el MSI, donde se verán las caras con G2 Esports.
Sin embargo, pese a lo noticioso que es que EG gane su primera LCS, quizá lo es más destacar al que, para muchos, ha sido su MVP (más que Inspired, incluso) al menos en playoffs: Danny.
El tirador norteamericano, nacido en Honolulu, Hawaii, ya es la gran promesa de Norteamérica tras pasar de la academia al primer equipo de EG en mayo de 2021, dando una uaténtica exhibición de ADC en los playoffs de LCS.
Y es que solo hay que comparar su estadísticas de temporada regular con los datos de playoffs: en la primera fase de LCS, Danny consiguió 93 asesinatos, 67 asistencias y 36 muertes en 19 partidas.
En playoffs, en 18 partidas, ha matado 111 veces, ha cosechado 106 asistencias y solo ha muertoen 27 ocasiones: es decir, una media de 6.17 asesinatos por mapa y 1.5 de muertes, una auténtica locura.
Danny ha dado una exhibición con Jinx, pero también con Xayah o Zeri, sus campeonas más jugadas, con una maestría absoluta en el posicionamiento y en el juego en equipo, ganándose por completo el amor de todo NA.
El prodigio, de 18 añitos, será la principal amenaza contra G2 Esports en el MSI, aunque Flakked y Targamas han dado también un repaso en playoffs de LEC, en lo que será uno de los duelos más épicos del año.