Los Angeles Dodgers, equipo que compite en la Major League Baseball (MLB) como miembro de la National League (NL), convertirá su encuentro ante los St. Louis Cardinals del 22 de agosto en la noche de la Overwatch League.
En ella, aquellos asistentes que hayan comprado entrada desde la web del evento recibirán una camiseta conmemorativa de esta colaboración entre la principal competición de deportes electrónicos de Blizzard con uno de las mayores entidades deportivas de los Estados Unidos.
Además, los 40 000 primeros recibirán también un ‘booblehead’ —una especie de muñeco cabezón— del veterano ‘segunda base’ Chase Utley, nativo de California y quien fichó por Dodgers hace tres años.
Este tipo de reclamos son algo habitual en el béisbol americano por la longitud de sus temporadas regulares. Sin embargo, no deja de ser un gran hito para los esports que uno de los principales equipos de la liga apueste por Overwatch para tratar de llegar a más aficionados.
El evento llega solo unos días antes de que Los Ángeles —donde se ha disputado toda la fase regular de la Overwatch League— sea el lugar de celebración del All-Star de la primera temporada de la competición, para el que los jugadores participantes fueron elegidos hace algunas semanas.
Dieciocho jugadores de cada división, la mayoría de los cuales son de origen coreano, fueron votados por el público o por sus propios compañeros de la liga. Los próximos 25 y 26 de agosto se darán cita en el Blizzard Arena en un evento en que el espectáculo está asegurado gracias a los divertidos modos de juego ya confirmados.
Quizás uno de los modos más esperados sea el Lúciobol, que ha vuelto a Overwatch con el evento de los Juegos de Verano y en el que los jugadores tendrán que intentar meter gol. Aunque en el juego hay otros dos mapas disponibles, durante el evento las partidas se limitarán al nuevo ‘Estadio de Busán’.
Más allá de estos modos —entre los que se incluyen un duelo de Widowmakers y ‘Héroes Misteriosos’—, el plato fuerte llegará el domingo en el duelo en el partido de los All-Star. Sin duda, promete ser un fin de semana apasionante al más puro estilo estadounidense.
*Imagen de cabecera propiedad de Christian Petersen/Getty Images.