Las rachas de bajas están oficialmente de vuelta en Call of Duty. Activision acaba de confirmar su presencia en el inminente Modern Warfare a través de redes sociales, un regreso que los aficionados al shooter seguro reciben con los brazos abiertos.
En caso de que no las conozcas, las rachas son ventajas temporales que se consiguen al lograr determinado número de muertes enemigas, y que confieren al jugador que las desbloquea un considerable aumento de sus capacidades bélicas.
La primera en desvelarse es el Vehículo de Asalto Anfibio, un tanque ligero armado con un cañón de 50mm que aunque no suene a mucho, podría abrir un boquete en un muro de hormigón. La imagen no deja claro si podremos controlarlo directamente o si será un elemento autónomo, pero sí insinúa un aumento considerable en el tamaño de los mapas para que se pueda utilizar de manera lógica.
El segundo de ellos es el Fósforo Blanco, un agente incendiario que en Vietnam apodaban cariñosamente Willy Peter (por las siglas en inglés de White Phosphorus). Sin embargo esta racha dará poca risa a los enemigos que la padezcan, ya que cubrirá el campo de batalla con un humo intenso y puede quemar a los jugadores que se acerquen demasiado.
En tercer lugar está el Juggernaut, un viejo conocido para los veteranos de Modern Warfare 3. Se trata de un traje que utilizan los desactivadores de bombas y que por tanto está preparado para recibir fuertes impactos de bala o explosivos, a cambio de sacrificar mucha movilidad. En la imagen publicada no se aprecia si irá acompañado de la ametralladora pesada Gatling, marca de la casa en MW3 y capaz de convertir un camión en un rayador de queso.
Los anuncios del modo multijugador no se detendrán aquí, y el día 1 de agosto está previsto que Activision muestre en su canal de Twitch novedades y partidas de prueba para ir abriendo boca. Con una fecha de lanzamiento prevista para finales de octubre, la espera se va a hacer larga.