En ocasiones, en FIFA hemos visto goles que parecen completamente imposibles. Solamente pueden ocurrir en este videojuego. Sin embargo, el Tottenham ha conseguido demostrar que el título de EA Sports no es tan irreal como puede parecer por momentos...
El Tottenham se enfrentó en la última jornada de la Champions League al Estrella Roja, en un partido que era clave para mantener sus aspiraciones de clasificación para los octavos de final. El conjunto inglés demostró un gran poderío para conseguir llevarse la victoria, aunque sigue muy lejos del nivel que mostró el año pasado y que le permitió jugar la final de la máxima competición europea.
A pesar de la diferencia de nivel entre los dos equipos, al Tottenham le costó más de lo esperado en abrir la lata. Es más, para hacerlo ha tenido que meter un gol que enfadaría hasta al jugador más calmado de FIFA. El conjunto inglés golpeó hasta en tres ocasiones en el palo antes de que Lo Celso consiguiera meterla dentro de la portería de una manera poco ortodoxa.
Alguno de los fallos son tremendamente complicados de explicar. El primer fallo de Harry Kane tiene un pase, pero desde ese momento todo empezó a volverse mucho más absurdo. Son vuelve a disparar y el defensa del Estrella Roja lo salva bajo palos.
Después, un mal tiro de Aurier le cae a Harry Kane en boca de gol, pero golpea tan mal la pelota que el tiro se convierte en un pase a Son, que lo tenía todo de cara para marcar. Pero en vez de usar las piernas decidió que lanzarse de rodillas, y golpear con el muslo, era mucha mejor opción.
Sea como fuere, el balón se estrelló contra el larguero y fue directo a Lo Celso, que lo introdujo, por fin, dentro de la portería. La reacción del portero es la que tendría cualquiera después de que le marcasen un gol de este estilo.
Además, si lo vemos desde el otro lado, estaríamos hablando de un hándicap tremendo. La verdad es que la frase de "El juego quería que se marcase este gol" cobra un sentido especial. Para que luego digan que FIFA no es real.