Suning vs. DAMWON: una final que promete estar a la altura

La gran final del Mundial de League of Legends, uno de los momentos más esperados cada año en los deportes electrónicos, está aquí. Llega tras algo más de un mes de competición en el que equipos de todo el mundo han puesto a prueba su nivel a través de distintas rondas y series cargadas de emoción.

La final de 2020 será especial, puesto que por primera vez desde el año 2017 habrá un equipo surcoreano en ella. La LCK ha sido tradicionalmente la región dominadora en el League of Legends internacional y hace solo un par de años era impensable que no estuviesen en la final durante dos ediciones consecutivas.

DAMWON ha sido el encargado de devolver a su región al lugar al que le corresponde tras un brillante torneo en el que no han despertado ninguna duda sobre su nivel. Superaron a JD Gaming en la fase de grupos, arrasaron a DRX en cuartos y terminaron con el sueño de G2 Esports de repetir final por segundo año consecutivo.

Por el otro lado del cuadro ha llegado Suning, un equipo chino que, tras un split de primavera bastante mediocre logró el cuarto puesto en verano y terminó en tercera posición los playoffs. Posteriormente, llegó al Mundial como tercer seed tras ganar las finales regionales.

Sobre el papel no eran uno de los favoritos, ya que partían en todas las quinielas por detrás de Top Esports y JD Gaming. Pero su rendimiento en scrims ya anticipaba que podían ser una de las sorpresas. Y, aunque es verdad que las scrims tradicionalmente han sido poco indicativas, este año los resultados sí se han ajustado y han arrasado hasta llegar a la gran final.

En grupos, pese a perder frente a G2 Esports en la primera partida y ceder un mapa ante Team Liquid, pasaron como primeros dejando una gran imagen, algo que no les sirvió para tener unos cruces especialmente favorables, puesto que primero tuvieron que verse las caras contra JD Gaming.

El segundo clasificado de su región no fue un obstáculo y se impuso por 3-1, exactamente el mismo resultado que logró más tarde ante Top Esports, el campeón chino y probablemente el gran favorito —aunque ya había despertado dudas ante Fnatic—. Llegan con la moral por las nubes y quieren ganar su primer Mundial en su país.