El tercer clasificado europeo afronta una fase de grupos muy complicada en Worlds, pero eso también juega a su favor: jugarán sin presión porque no pasar no sería un fracaso.
Rogue afrontará en 2020 su primer Mundial de League of Legends tras un split espectacular de la LEC en el que no solo terminaron campeones la fase regular sino que estuvieron a punto de eliminar en playoffs a G2 Esports, que arrasó posteriormente a Fnatic en la gran final.
Se trata de un club que entró en el League of Legends europeo con el paso a la LEC pero que hasta el momento se había mantenido lejos de la mirada de los aficionados del Viejo Continente, ya que su actividad deportiva se había concentrado mayoritariamente en Norteamérica y en otros juegos.
No obstante, con importantes inversores detrás —destacando Steve Aoki y algunos miembros de Imagine Dragons— consiguieron hacerse con una de las plazas de la LEC y decidieron situar a su filial en Polonia. Su primer split fue desastroso y quedaron últimos, pero decidieron cambiar muchas cosas de cara a verano,
Con el ascenso de tres jóvenes talentos de su filial como Finn 'Finn' Wiestål, Kacper 'Inspired' Słoma y Emil 'Larssen' Larsson mejoraron enormemente y ya lograron la cuarta plaza en los playoffs de verano de 2019. Para 2020, además, decidieron mejorar las dos posiciones restantes a dos jugadores con una gran trayectoria como Steven 'Hans Sama' Liv y Oskar 'Vander' Bogdan.