Worlds tuvo que jugarse sin público / lolesports Flickr

Firmas de opinión

2021, un año lleno de incógnitas para los esports

El cambio de año es anecdótico en lo referente a la pandemia y el sector tendrá que seguir luchando por adaptarse a una situación que lo ha trastocado todo.

El año 2020 ha terminado y lo cierto es, pese a todo, no ha sido un mal año del todo para el mundo de los deportes electrónicos. Pese a las evidentes dificultades a las que se ha tenido que enfrentar el sector, ha conseguido aprovechar sus fortalezas para salir adelante y pudimos vivir, por ejemplo, los Worlds de League of Legends.

Quizás hemos vivido uno de los finales de año más esperados de siempre, pero en realidad no deja de ser una fecha más en el calendario y seguimos inmersos en plena pandemia. Y eso se aplica también a los deportes electrónicos, que tendrán que seguir enfrentándose a las mismas dificultades que en 2020.

Lo habitual es opinar a comienzos de cada mes de enero que el año venidero va a ser muy bueno para los deportes electrónicos. Y estoy seguro de que lo será. Pero este 2021 hay que tener claro que, sobre todo, va a ser un año cargado de incógnitas y de retos para el sector, que tendrá que seguir adaptándose.

No parece que las restricciones a la movilidad vayan a terminar de la noche a la mañana y tendremos que acostumbrarnos, al menos durante un tiempo, a seguir viendo torneos divididos por regiones y que se jueguen online. A nivel puramente deportivo no es un gran drama: la pérdida de competitividad es relativa y las grandes competiciones internacionales se juegan normalmente en la segunda mitad del año.

Pero en todo lo demás sí es más complicado. La ausencia de eventos hace muy difícil que los equipos puedan conectar con sus seguidores y los aficionados en general pierden los lugares de encuentro, por no hablar de lo que resta la ausencia de público a nivel narrativo. Son problemas que hemos visto en 2020 y que no se solucionarán a corto plazo.

Otro tema distinto, aunque muy relacionado con el sector, son los creadores de contenido. En términos de audiencia ha sido un año maravilloso para ellos, ya que se han disparado y raro es el mes en el que no vemos algún tipo de récord. En 2021 la cosa debería ir en aumento y a buen seguro nos sorprenderán.

Eso no significa, pese a todo, que en ese campo no haya también muchas incógnitas. Los eventos presenciales ayudan también a los streamers y su ausencia es un problema, además de que todavía hay que ver cómo va a evolucionar la situación publicitaria. Aunque el gran reto aquí es claro: no aburrir.

A finales de diciembre reflexionaba sobre cómo Among Us ha cambiado el mundo del streaming y ha convertido lo excepcional en cotidiano. De momento, Egoland nos ha demostrado que todavía pueden sorprender, pero de lo cotidiano a lo aburrido hay solo un paso y streamers y creadores de contenido tendrán que moverse muy bien en esa fina línea.

Sea como sea, lo que sí es una realidad es que los esports han llegado para quedarse. La forma en la que superen estos retos afectarán al corto y medio plazo, pero creo que 2020 nos ha dejado motivos para confiar, ya que sin margen de planificación para adaptarse a una pandemia hemos tenido muchos momentos cargados de emoción, y nada me hace pensar que en 2021 no vaya a ir a más.