El presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), Thomas Bach, ha declarado en una entrevista con el diario deportivo español MARCA que el debate sobre la inclusión de los deportes electrónicos en los Juegos Olímpicos podría quedar para su sucesor.
Preguntado por el citado diario acerca de si tiene clara su visión acerca de los esports, ha reconocido que no la tendrá hasta que culmine la cumbre olímpica en la que verán su "estrategia de aproximación". Para Bach, además, es importante definir claramente si son o no un deporte, aunque recuerda que no es el único desafío.
El presidente del COI también repasó otros inconvenientes que presentan los deportes electrónicos, tales como la violencia en los videojuegos, a la vez que señalaba que los esports no son una comunidad, sino que son "diferentes organizaciones comerciales que forman una industria". "Una cosa es el movimiento social del deporte y otra cosa la industria", señalaba.
Además, también ha querido hacer hincapié en el rápido desarrollo tecnológico y mostró reparos a incluirlos si en dos años quedaban totalmente sustituidos por la integración total de tecnologías en auge como la realidad virtual y la realidad aumentada.
No es la primera vez que Bach se pronuncia sobre los deportes electrónicos, ya que el debate sobre esports y olimpismo ha estado más vivo que nunca durante los últimos meses, en parte por la exhibición que albergaron los Juegos Asiáticos en el mes de agosto.
En julio se organizó un foro en el que se invitó a diferentes actores de la industria para tantear las posturas desde ambos campos. En aquel momento, Bach señalaba lo siguiente: "Aquellos [juegos] que promocionen la violencia o cualquier tipo de discriminación no serán considerados miembros del movimiento olímpico".
En la misma línea se posicionaba a comienzos de septiembre en una entrevista con Associated Press en la que afirmaba que "esta clase de juegos asesinos son contradictorios con los valores olímpicos y, por tanto, no pueden ser aceptados".
La polémica, sin embargo, ha trascendido al COI y ha alcanzado a organismos de nivel estatal. Uno especialmente sonado fue el proyecto de ley en Argentina para incluir los deportes electrónicos dentro de la Ley Nacional del Deporte, pero que dejaba fuera a los juegos considerados violentos.
Más recientemente, en Alemania el comité olímpico nacional decidió distinguir entre simuladores deportivos y el resto de títulos (a los que catalogaban como eGames) y rechazar una posible federación dedicada a la regulación de estos como deportes.
*Fuente imagen de cabecera: Makaristos (Wikimedia Commons)