La estrategia de Shyvana inmortal

Tácticas Maestras (TFT) premia enormemente la creatividad con las piezas y los objetos para alcanzar, en última instancia, la victoria. Por ello, no dejan de aparecer grandes estrategias que, de realizarse, convierten a algunas piezas en algo auténticamente abusivo.

Dos ejemplos que trajimos en el pasado fueron el Pyke con dos Lanzas de Shojin o la Akali con Hechiceros y Eco de Luden —una opción que se aprovechaba de un bug pero que, sin él, debería ser igualmente divertida—. Hoy os vamos a hablar de otra campeona: Shyvana.

Esta estrategia la sufrió Hafu, la mejor jugadora de TFT, mientras jugaba en el PBE para probar los últimos cambios del modo. En una de las últimas rondas —fase 5-4—, se vio las caras contra un jugador llamado DouYu7183355 que estaba jugando una composición bastante habitual: Salvajes, Cambiaformas, Hechiceros y Dragones.

Ella, con una composición de Ninjas, Elementalistas, Asesinos y Demonios, no tuvo problemas en acabar con prácticamente todo el equipo de su rival: tras unos segundos quedaban vivas siete de sus piezas y el Gólem, mientras que al rival solo le restaba Shyvana.

Esta Shyvana de nivel 3 llevaba equipados el Sablepistola Hextech, la Armadura de Warmog y la Malla de Espinas. El tercer objeto devuelve una tercera parte del daño recibido, mientras que los otros dos le ayudan a recuperar salud (la Warmog de forma pasiva y el Sablepistola le recupera un 25 % de todo el daño que causa).

Estos tres efectos combinados en una pieza de nivel 3 ya son, por sí mismos, poderosos, pero a ellos se les unen dos de las bonficiaciones que tenía: la de Dragones, que la vuelve inmune al daño de hechizos —principal fuente de daño de varias de las piezas de Hafu— y la de Cambiaformas, que duplica su salud al transformarse —pasando de unos 2000 a casi 4000—.

¿El resultado? Shyvana aguantó casi 30 segundos recuperándose prácticamente todo el daño que recibía y, además, acabó con todos los enemigos rivales, lo que hizo que la partida terminase para Hafu, a quien le restaba solo un punto de vida.